Ya es tiempo de fresas y fresones, unas frutas que evocan el inicio de la primavera.
Sabemos que son unas frutas delicadas y perecederas, que se deterioran con mucha facilidad, por eso podemos aprovechar las que empiecen a ponerse maduras preparando esta mousse.
Las fresas tienen mucha vitamina C, presente en mayor cantidad que los cítricos, y consumiendo 100 gramos de esta fruta al día, se está cubriendo la cantidad necesaria diaria de esta vitamina. Además, tienen pocas calorías y nos aportan mucha fibra.
Ingredientes:
- 600 gramos de fresas.
- 1 yogur (yo puse un yogur natural azucarado. Mejor si es un yogur con consistencia, sino uno normal).
- el zumo de 1/2 limón.
- 200 ml. de nata líquida.
- 6 cucharadas soperas de leche condensada (al gusto, si os gusta más dulce le ponéis un poco más).
Preparación:
Limpiamos las fresas, les quitamos el pedúnculo, y las ponemos en el vaso de la thermomix. Añadimos el resto de ingredientes y trituramos durante 30 segundos a velocidad 5, o hasta que las fresas estén totalmente trituradas.
Mejor prepararlo la víspera, o con unas horas de antelación, para que coja más consistencia.
Versión más light eliminando la nata, también muy rico, aunque sabe más a yogur:
Ingredientes:
- 2 yogures naturales azucarados.
- 600 gramos de fresas.
- 5-6 cucharadas soperas de leche condensada (o más si os gusta más dulce).
Preparación:
Limpiamos las fresas, les quitamos el pedúnculo, y las ponemos en el vaso de la thermomix. Añadimos el resto de ingredientes y trituramos durante 30 segundos a velocidad 5, o hasta que las fresas estén totalmente trituradas.
Nota: Podemos servirlo de diferentes maneras, directamente en un vasito o copa decorándolo con unos trozos de fresa o con un hilo de mermelada de fresa. Otra forma de presentación seria intercalar capas de fresas troceadas y de mousse (fresas troceadas en el fondo de la copa, una capa de mousse, más fresas troceadas y acabar con una capa de mousse decorando al gusto).
También se puede congelar.
Fuente: Receta de mi madre Tonia Mascaró.